Los consumidores muchas veces identificamos a las marcas por sus características visuales. Solo por el color utilizado en un anuncio, la ubicación de algunos elementos o hasta la tipografía podemos adivinar de qué marca se trata. Si observas un fondo rojo, una botella y una tipografía blanca, ¿qué marca se te viene a la mente? Sí, Coca Cola, a eso nos referimos. Esas características son propias de cada marca y generan una identidad, pero no es fácil mantener esa línea. No se trata solamente de un diseño y ya, sino de tener muy claro cómo quieres que te recuerden. La línea gráfica es aquella que representa la identidad visual de la marca, por lo cual debe definirse y ser respetada para mantener una fluidez en nuestra comunicación con el público.

Con una línea gráfica establecida y coherente con tu marca, lograrás que te recuerden, atraerás al público deseado y ganarás un espacio en la mente del consumidor. Si no manejas una identidad visual, tu marca se verá poco profesional, descuidada, y será más difícil que te recuerden. Para empezar, debes definir un concepto sobre qué busca transmitir tu línea gráfica, crea un moodboard (lluvia de ideas visual, gráfica) como boceto de lo que planeas y verifica que esté acorde con ello, define tu paleta de colores, define qué tipografías representan la personalidad de tu marca y, por último, define los elementos visuales para la composición en los diversos medios. Debemos estar seguros de que todos estos elementos suman a los que queremos transmitir. Recordemos que no solo se trata de elegir “un color que me guste”, sino de ser conscientes de que cada una de nuestras elecciones comunica.

¿Es importante contar con un manual de marca?

Claramente, sí. Este documento debe detallar todo lo que se debe saber sobre la identidad gráfica de nuestra marca para que cualquier miembro del equipo (o algún externo que necesite conocer un poco más sobre la marca) pueda conocer minuciosamente no solo las características visuales, sino también los usos permitidos y los prohibidos.

Entonces, usar de manera adecuada los colores institucionales, trabajar con las tipografías que representan la personalidad de tu marca, cuidar la simetría velando por el orden y la armonía visual, harán que la audiencia identifique fácilmente a una empresa por gestionar de manera adecuada la línea gráfica. Cabe mencionar, que debe alinearse a lo que la marca representa, el aspecto visual genera gran impacto en el mercado. Y tú, ¿te animas crear la línea gráfica de tu marca?